¿Cómo elegí el nombre japonés de Kakebo para una Administración de fincas en Murcia?
Hola vecinos, hoy os traigo al blog la historia del nombre de Kakebo. Es una historia que me encanta contar a mis amigos y ahora me gustaría compartirla con vosotros para que nos conozcáis un poquito mejor.
Hace un par de veranos un amigo hizo un viaje a Japón. Un país espectacular al que me encantaría ir, sólo diré eso porque sino convertiría este post en un blog de viajes.
Allí en una de sus múltiples tiendas encontró un libro que se llamaba Kakebo. Le llamó la atención su portada y vio que decía que era un libro que te enseñaba a ahorrar en tu economía domestica. Mi amigo sabe que siempre me ha gustado mucho el tema de la planificación financiera en el hogar y me lo compré en inglés. Cuando me lo regaló me puse a investigar un poquito más sobre el Kakebo y su historia y el por qué de su utilización y me terminó de encantar para ponerle el nombre a mi recién creada empresa de administración de fincas en Murcia.
Aquí os dejo la historia.
Kakebo es el libro de las cuentas de casa que los japoneses utilizan para administrar el propio presupuesto. En la práctica es una especie de agenda en la que registrar los ingresos y los gastos pero sobre todo reflexionar sobres los hábitos, para así aprender a ahorrar y a mejorar la administración de las finanzas.
El primer Kakebo se puso a la venta en Japón en 1904. Su inventora fue Motoko Hani, fundadora de la revista femenina más antigua de su país llamada La compañera de la mujer, en la que también ayudaba y animaba a las lectoras a llevar el control de la economía doméstica.
Una mujer muy interesante ya que fue pionera en Japón por muchos motivos. Vivió en un contexto social de muchísimo cambio para su país, ya que salía de un régimen y entraba en otro, estaba en plena modernización. Ella fue una de las primeras personas que accedió a la educación superior y está considerada como la primera periodista de Japón. Abogaba por el autoconocimiento y la independencia de la mujer en todos los aspectos de la sociedad: en el familiar, en el trabajo, etcétera. De hecho, también fundó una escuela de libre enseñanza superior.
La idea de Hani no sólo estaba orientada al control de los gastos sino que, de alguna manera, también quiso que fuese un arma de empoderamiento femenino. En su momento fue muy innovador porque las mujeres recibían el dinero que llevaban sus maridos a casa, podían distribuirlo y ahorrar una parte para gastarlo en ellas mismas. Fue una herramienta de emancipación.
Espero que os haya gustado el por qué del nombre de Kakebo. Nos vemos en los próximos post con más temas relacionados con la administración de fincas y la economía domestica en Murcia.